Marco Teorico

Autores que me dan un enfoque investigativo acerca del tema “arte-anatomía”

LIBRO: Anatomía, perspectiva y composición para el artista

AUTOR: Stan Smith

 

“El conocimiento de los huesos y músculos del cuerpo ayuda al artista a interpretar la forma y equilibrio de una postura, dando autoridad a las figuras dibujadas”[1]

 

En el apartado introductor de este libro, el autor nos hace referencia a un aspecto de límite entre el arte y la anatomía, este postula que muchos artistas adoptan un conocimiento simple en el campo de la anatomía, para posteriormente aplicarlos en sus dibujos o pinturas con el objetivo de no perder de vista lo que a un artista en pocas palabras lo hace artista “la inspiración”, afirma este aspecto diciendo que, el estudio demasiado profundo y de naturaleza científica puede distraer, en el mejor de los casos, y seducir en el peor.

 

Este libro hace un recorrido por todas las partes del interior del cuerpo humano, huesos, sus rotaciones… músculos, sus direcciones, sus entramados, su elasticidad y funcionamiento… entre muchos aspectos de constitución en el cuerpo humano, todo esto enfocado hacia el artista, y mas bien como un carácter de lo simple en formas, funciones, con el fin de no caer en la seducción anatómica.

Habla un poco de como el hombre llevo su estado de descubrir de formas a lo mas interno del cuerpo humano, todo esto gracias a las disecciones.

En el apartado de NOTAS HISTORICAS, dice, sobre las disecciones y descubrir de las formas internas del cuerpo humano:

 

“Los principales logros tuvieron lugar durante el renacimiento. Una época en que nació la ciencia experimental y la investigación, cuando se adquirió una nueva conciencia de la dignidad humana y de su potencial para crear un nuevo ambiente en el que vivir. El cuerpo humano dejo de considerarse como una cascara insignificante que albergaba un alma inmortal; se convirtió en el objeto de intensos estudios e investigaciones.”[2]

 

Este libro en pocas palabras es el documento tangible en el cual se pondrá de manifiesto la veracidad de muchos de nuestros planteamientos y posturas en cuanto al tema a investigar “arte-anatomía”

 

 

 

LIBRO: Anatomía para el artista

AUTOR: Sarah Simblet- John Davis

Sarah Simblet es profesora en la Ruskin School of Drawing and Fine Art, de la Universidad de Oxford, y también en el Royal College of Art, en Londres. La artista ha estudiado y trabajado en Oxford, Cheltenham, Heidelberg y Madrid, y obtuvo su título de doctorado en la Universidad de Bristol. En su tesis examinó los aspectos de la relación entre el dibujo y la disección humana, y sus dibujos se encuentran en diversas colecciones nacionales y privadas, entre ellas en la Royal Academy of Art, de Londres, y en el Ashmolean Museum, de Oxford.

John Davis ha trabajado durante varios años como fotógrafo en Australia, donde disfruta de gran popularidad gracias a sus impresionantes imágenes, de enorme fuerza y luz.

 

En este libro, el artista incluye un medio moderno que atrapa con mayor facilidad la atención del lector y observador, sus fotografías juegan un papel muy importante en su obra, ya que se captura con mas fiabilidad esos aspectos invisibles para el ojo humano que interactúan entre la proporción humana y su constitución muscular, externa factores de importancia en la anatomía humana.

 

Este libro en pocas palabras transita por las dos vertientes del cuerpo humano, en su parte externa en la cual se plantea la fotografía como mediadora, y la parte interna o estructural del cuerpo humano, en la cual se emplean ejemplos de obras, y datos investigativos sobre el interior de nuestro cuerpo humano.

 

 

 

LIBRO: “De humani corporis fabrica”

AUTOR: Andrés Vesalio

Parrafos del PROLOGO:

... La deplorable división del arte del tratamiento introdujo en las escuelas el detestable procedimiento en el que algunos realizan la disección del cuerpo humano y otros presentan la descripción de sus partes, estos últimos como cuervos trepados en sus altas sillas, con egregia arrogancia eructan cosas que nunca han investigado sino que simplemente han memorizado de los libros de otros, o de lecturas de lo que ya se ha descrito. Los primeros son tan ignorantes de idiomas que son incapaces de explicar sus disecciones a los espectadores y confunden lo que debería demostrarse de acuerdo con las instrucciones del médico que, como nunca ha usado sus manos en la disección de un cadáver, desdeñosamente capitanea el barco desde un manual. De esta manera todo se enseña mal en las escuelas, los días se gastan en cuestiones ridículas y, con tal confusión, se les presenta menos a los espectadores de lo que un carnicero le podría enseñar a un médico en su puesto...

Ellos (los anatomistas contemporáneos) dependen tan firmemente en yo-no sé-que propiedad de los escritos de su líder que, junto con la falta de práctica en la disección de otros, han reducido vergonzosamente a Galeno a breves compendios y nunca se apartan de él —si es que alguna vez lo comprenden— ni por el espesor de una uña. De hecho, en los prefacios de sus libros anuncian que sus escritos están totalmente armados con las conclusiones de Galeno y que todo lo de ellos es de él, agregando que si por casualidad alguien los criticara debería considerarse que Galeno también había sido criticado. Se han rendido de manera tan completa a él que no hay médico que pudiera declarar que alguna vez se hubiera encontrado ni siquiera el mínimo error, mucho menos que ahora se encontrara, en los libros anatómicos de Galeno —excepto que Galeno frecuentemente se corrige a sí mismo, aludiendo a su negligencia en libros previos y enseñando lo opuesto en obras posteriores, cuando ya tenía más experiencia— aunque para mí está bien claro, gracias al renovado arte de la disección, a lecturas diligentes de los libros de Galeno y a su corrección en varios sitios — por lo que no nos avergonzamos— que él nunca disecó un cuerpo humano y que confundido por sus monos (aunque sí tuvo acceso a dos cadáveres humanos ya secos), frecuentemente y de manera inadecuada se opuso a los médicos antiguos educados en el arte de la disección…

Sin embargo, en este momento no intento criticar las falsas enseñanzas de Galeno, fácilmente el príncipe de los profesores de la disección; mucho menos deseo ser considerado como desleal al autor de todo lo bueno y como irrespetuoso de su autoridad. Porque recuerdo cómo los médicos en amplia diferencia con los seguidores de Aristóteles -se alteran cuando en una disección anatómica actual ven que las descripciones galénicas son incorrectas en más de doscientos aspectos relacionados con la estructura humana y sus usos y funciones, y cómo durante el examen de las partes disecadas tratan de defenderlo con gran energía y aplicación. Sin embargo, hasta ellos mismos, dominados por su amor a la verdad, poco a poco han cedido y ahora ponen más fe en sus propios ojos y en su razón que en los escritos de Galeno...[3]

 

 

 


[1] Stan, Smith. Año de Publicación: 1996. Título del Libro: Anatomía, perspectiva y composición para el artista. Ediciones AKAL. Capitulo: Introducción. Página: 10.

[2] Stan, Smith. Año de Publicación: 1996. Título del Libro: Anatomía, perspectiva y composición para el artista. Ediciones AKAL. Capitulo: Notas históricas. Página:10

 
 
 
LEONARDO DE VINCI
(Dibujos anatomicos de Leonardo de Vinci)
      
  
 

Biografia:

Leonardo da Vinci (Leonardo di ser Piero da Vinci Loudspeaker.svg escuchar) fue un pintor florentino. Notable polímata del Renacimiento italiano (a la vez anatomista, arquitecto, artista, botánico, científico, escritor, escultor, filósofo, ingeniero, inventor, músico, poeta y urbanista) nació en Vinci el 15 de abril de 1452 y falleció en Amboise el 2 de mayo de 1519, a los 67 años, acompañado de su fiel Francesco Melzi, a quien legó sus proyectos, diseños y pinturas.

El método científico de Leonardo se basaba fundamentalmente en la observación, «la ciencia fue el capitán, la práctica fue el soldado».23 Sus investigaciones científicas no se refieren exclusivamente más que a lo que ha estado acompañado de la práctica.11 Leonardo intentó comprender los fenómenos describiéndolos e ilustrándolos con mucho detalle, no insistiendo demasiado en las explicaciones teóricas.

Casi 500 años después de su muerte, Leonardo da Vinci (1452- 1519) sigue revelándose al mundo (además de como artista, inventor y científico) como uno de los más geniales anatomistas de la historia. El avance en la tecnología médica, que ahora permite captar imágenes reales del cuerpo humano con lujo de detalles, no hace más que reafirmar el talento del maestro renacentista. Leonardo da Vinci: The Mechanics of Man (Leonardo da Vinci: La mecánica del hombre), en la Queen's Gallery del Palacio de Holyroodhouse de Edimburgo (Escocia, Reino Unido) reúne por primera vez los numerosos estudios de anatomía de los cuadernos de Da Vinci e imágenes digitales en 3D y escáneres de resonancias magnéticas realizados con las últimas tecnologías. El contraste descubre la asombrosa exactitud con que el artista e inventor representó el cuerpo humano al detalle. Comenzó con sus estudios con la ambición de dominar las formas del cuerpo, para asegurarse de que sus pinturas fueran tan "fieles a la naturaleza" como fuera posible. Pronto la misión artística se tornó divulgativa y Leonardo concibió la idea de escribir y publicar un tratado ilustrado de la anatomía humana. 240 dibujos y más de 13.000 palabras Entre 1507 y 1513 diseccionó más de 30 cadáveres, llenó cientos de páginas de sus cuadernos con documentación y observaciones sobre órganos, vasos sanguíneos, huesos y músculos y los dibujó como nunca antes se habían representado. A su muerte en 1519, la obra —entre papeles privados—  no se había publicado y permaneció en un limbo durante cientos de años. Si hubiera sido divulgado en su día, el trabajo hubiera sido decisivo para el desarrollo científico. La ilustración anatómica de la época se encontraba todavía en una fase muy elemental.[4]

 

ANDREAS VESALIO 

(dibujos anatómicos)

      

Andries van Wesel (Bruselas, actual Bélgica, 31 de diciembre de 1514 - Zante, actual Grecia, 15 de octubre de 1564), autor de uno de los libros más influyentes sobre anatomía humana, De humani corporis fabrica (Sobre la estructura del cuerpo humano). Basó sus estudios anatómicos en la observación directa, rechazando algunos errores anatómicos presentes en la obra de Galeno, por lo que es considerado el fundador de la anatomía moderna.[5]

 

PINTURAS ANATOMICAS A RESEÑAR EN ESTE TRABAJO INVESTIGATIVO

 

              Obra de Michiel van Mierevelt                                             Obra de Thomas Keyser

La lección de anatomía del Dr. van der Meer (1617)          Lección de osteologia del Dr. Egbertsz  (1619)

                                             

 

Obras de Rembrandt

La Lección de anatomía del Dr. Nicolaes Tulp (1632)    La lección de anatomía del Dr. Deijman (1656)

                                       

 

                      Obra de Adrian Backer                                               Obras de Jan Van Neck

La lección de anatomía del Profesor Ruysch (1670)   La Lección de Anatomía del Dr Frederick Ruysch (1683)

                                 

 

                       Obra de Cornelis Troost                                        Obra de Augustine Ferret-Perrin

La lección de anatomía del Profesor Roell (1728)      La lección de anatomía del doctor Velpeau (1795-1867)

                                 

 

Obra de Enrique Simonet

Anatomía del Corazón (1863-1927)

 

 

Michiel Jansz. van Mierevelt (Delft,1567 – 1641) fue un pintor barroco neerlandés, especializado en la pintura de retratos.[6]

Thomas de Keyser (Ámsterdam, h. 1596/1597 - Ámsterdam, 1667) fue un pintor y arquitecto neerlandés de la época barroca. De Keyser se distinguió como retratista, especialmente en retratos de cuerpo entero de medio tamaño natural. Rembrandt fue influido por su obra, y muchos de los cuadros de Keyser se atribuyeron más tarde falsamente a Rembrandt. Sólo se le conoce un retrato ecuestre, el de Pieter Schout, pues este género tan cortesano no era muy cultivado en los Países Bajos. Sus retratos están llenos de carácter y están magistralmente tratados, y a menudo se distinguen por un rico brillo dorado de color y claroscuro rembrandtesco. Algunos de sus retratos son a tamaño natural, pero el artista generalmente prefirió realizarlos en una escala considerablementde menor.[7]

Rembrandt Harmenszoon van Rijn; Leiden, Países Bajos, 1606 - Amsterdam, 1669) Pintor holandés.

Las dos etapas, próspera y adversa, de la vida de Rembrandt van Rijn se reflejan en sus obras, particularmente en los autorretratos, un género que el artista cultivó a lo largo de toda su carrera; mientras que los primeros son alegres, brillantes y un tanto superficiales, los de los últimos años tienen un carácter sombrío, sereno, y reflejan una profundidad muy superior. De los numerosos géneros que cultivó, el religioso y el retrato fueron los dos en que más brilló su talento de maestro del Barroco. A Rembrandt se le recuerda, de hecho, sobre todo por sus magistrales retratos de grupo, absolutamente alejados de los convencionalismos al uso. La maestría compositiva, la perfecta caracterización de los personajes, el detallado estudio de los ademanes, la agudeza de los rostros, hacen de sus tres grandes creaciones de este género (La lección de anatomía del doctor Tulp, La ronda de noche y Los síndicos del gremio de pañeros) unas obras llenas de vida y de genio.[8]

Adriaen Backer (Ámsterdam, c. 1635-1684), fue un pintor barroco holandés, especializado en retratos. Pintor de retratos y de retratos de grupo al gusto holandés (Regentes del hospicio de Ámsterdam, Berlín, Gemäldegalerie; Retrato de grupo de los inspectores del Collegium Medicum en Ámsterdam, Ámsterdam, Rijksmuseum; Lección de anatomía del profesor Frederik Ruysch, Amsterdam Museum ), cultivó también el retrato alegórico y la pintura religiosa, destacando en este género el Juicio Final pintado para la sala del consejo del Ayuntamiento de Ámsterdam (actualmente Palacio Real) o la Erección de la Cruz del Museo Amstelkring.[9]

Cornelis Troost, (* Ámsterdam, Países Bajos, 8 de octubre de 1696 - † ibidem, 7 de marzo de 1750), fue un pintor, grabador e impresor holandés. Hijo de un orfebre, Troost fue actor de teatro al menos desde 1717 hasta 1724, y después de esta fecha, pintor de profesión. Casó con Susanna Maria van der Duyn en 1720 en Zwolle, y tuvieron ocho hijos. Tuvo como discípulos artísticos a dos de sus hijas, Sara y Elisabeth, y también, fuera de su familia, a Jacobus Buys. Está catalogado como el más importante artista holandés del siglo XVIII, habiendo recibido numerosas comisiones. Recuerda las escenas de género holandesas del siglo XVII, aunque añadiéndoles un tono satírico, que le ganó el apodo del Hogarth holandés. Su obra, en opinión de la mayor parte de los críticos, no muestra un desarrollo estilístico propio, aunque muestra una notable versatilidad en la elección de asuntos y en la técnica. [10]

Enrique Simonet Lombardo (Valencia, 1866 - Madrid, 1927) fue un pintor español.

El lienzo en cuestión se titula ‘¡Y tenía corazón! (La anatomía del corazón)’, y es una obra pintada por el artista valenciano Enrique Simonet Lombardo en 1890. Como puede apreciarse a primera vista, la pintura muestra la autopsia realizada a una joven, una escena que fue hábilmente plasmada por el artista y ante cuya visión no es difícil imaginar que cause, aún hoy, un notable éxito entre los espectadores. El interés de los artistas por las escenas de autopsias, operaciones quirúrgicas o clases de anatomía no es nada extraño. Apenas unos años antes de que Leonardo da Vinci se “obsesionara” con el estudio de cadáveres para mejorar sus conocimientos de anatomía –y dejara decenas de fantásticos dibujos como testimonio de ello–, otro genio, El Bosco, usaba sus pinceles para ‘regalarnos’ la sorprendente escena de ‘La extracción de la piedra de la locura’. Un tema, por cierto, que repetirían numerosas ocasiones otros pintores en las décadas siguientes.

Con el paso del tiempo se sucederían las obras de temática similar: en la primera mitad del siglo XVII Rembrandt realizó con maestría una de sus obras más conocidas, ‘La lección de anatomía del Dr. Tulp’, y ya en el siglo XIX el estadounidense Thomas Eakins causó un notable escándalo con ‘La clínica del Dr. Gross’.[11]